El día que me vaya


Aunque dentro de mucho tiempo, el día que me vaya solo debéis recordar esto: he sido inmensamente feliz. He amado y me han amado. He aprendido numerosas formas de hacer el amor y he regalado todo el amor que recibí a toda persona dispuesta a reconocer una sonrisa. He sido amiga y he gozado de la mejor familia y amigos que cualquiera podría querer a su alrededor. He aprendido a disfrutar de cada momento como si fuera el último, independientemente de su contenido en tristeza o alegría incontenible. Me he acompañado de música y de libros, de fotografías, de colores, de comidas y de infinitos condimentos que me han salpimentado las mañanas y las tardes y las noches. He viajado. He hecho lo que he deseado y he aprendido a encontrar los caminos que me han acercado a mis metas. He amado, tanto, que no debéis preocuparos por mí. Porque he vivido siendo inmensamente feliz. 

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